Entiendo perfectamente que no tiene nada que ver conmigo. El ser humano no está preparado para decir que NO. Es básicamente querer complacer a otros lo que nos lleva a alejarnos y escondernos detrás de una red social porque no nos atrevemos a decir NO me interesa.
Pensar que quien está al frente te rechace, quiera pelear o forme conflicto y te haga quedar en ridículo frente a los demás, es el mayor temor. En casa, en el colegio y universidad nunca nos enseñaron comunicación efectiva y asertiva. Siempre quien levantaba la voz y preguntaba o decía lo que pensaba, lo hacían callar y quedar mal ante todos los demás; de ahí nace nuestro miedo para expresar lo que pensamos y sentimos respecto a lo que no queremos hacer.
Son muy pocas las personas que dicen: NO gracias por tenerme en cuenta pero no me interesa. Esas personas tuvieron una crianza donde podían expresarse o han tenido un crecimiento personal enorme.
El sentimiento de culpa es una causa muy común para querer esconderte. Te sientes inferior, que no eres capaz de hacerlo y prefieres alejarte.
La desconfianza en los demás, tantas estafas que a nivel mundial se encuentran las personas en los países, han dañado la imagen de quienes quieren hacer negocios de manera correcta, de quienes quieren honestamente darte un servicio u ofrecerte un producto. Por eso las personas incluso huyen, sin haber por lo menos escuchado la propuesta.
También va muy ligado a las personas que muestran sus avances en redes sociales cuando te hablan de crecimiento personal, de paz interior, de alguna religión, o de sus cambios físicos. En ocasiones se encuentran juzgados por aquellos que no se han atrevido a tener cambios o que les da miedo mostrar los que han obtenido ante los demás, por el temor de ser juzgados o sentirse heridos.
La vida siempre te va a mostrar con quien si y con quien no. Sin embargo, la palabra NO siempre va a existir en el vocabulario y será usada muchas veces ante ti como un susurro, como un grito o transformada en silencio. Tú solo continúa haciendo tu labor, obrando para bien, dando tu 100% en lo que te apasiona; porque llegará el momento de la gloria. De tu gloria.
Y si en algún momento me has dejado en visto o no te has atrevido a decirme NO, no te preocupes, ya ni me acuerdo si te escribí. La vida y mis proyectos siguieron sin ti. Y no creas que te guardo rabia o rencor porque tu silencio o tu NO, simplemente me han hecho más fuerte. Por el contrario, gracias.
Con amor,
Alexandra Gómez S.
Si muy sabio, tanto como tú misma, esta palabra la escuchamos desde muy pequeños, unas veces bien recibida y otras veces muy odiada, me gustan estos espacios, gracias por seguir haciendo tus sueños realidad sigue siendo inspiración para tod@s nosotr@s
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