He experimentado esta ley en todos los aspectos de mi vida. Ha sido un proceso muy sanador y liberador reconocer que la ley del vacío necesita ser aplicada en cada uno de los pilares fundamentales de mi existencia, que esta ley es también conocida como la ley de la abundancia, porque cuando liberas espacio, atraes más bendiciones.
Te han hecho entender que regales la ropa que no usas, los juguetes con los que ya no juegas, que debes compartir lo que tienes; lo que muy pocas veces te enseñan es que debes vaciar tu corazón de malos sentimientos, limpiar tu mente de malos pensamientos, vaciar tu nevera de comida dañina, regalar al universo aquellas relaciones tóxicas que te mantienen sometido.
No es solo lo material aquello que te está haciendo daño o estancando, son esas personas, palabras, actitudes, malos hábitos, que no te dejan avanzar hacia la vida que sueñas.
Cuando aprendes a soltar, le das espacio a nuevas oportunidades, a conocer personas maravillosas, a vivir experiencias diferentes y positivas.
Empieza hoy mismo a aplicar la ley del vacío en tu vida. Limpia tus espacios, saca lo que no usas, el orden atrae luz. Tenemos a nuestro alrededor objetos que no se necesitan y que solo forman en ti una actitud acumulativa.
Abre tu mente a nuevas oportunidades, cuando decides hacerlo, el universo empieza a hacer su trabajo, mostrarte lo que debes ver, se te quita una venda de los ojos que le facilita el trabajo a Dios y a la vida para darte lo que mereces y estás buscando hace mucho tiempo.
Nunca te des el permiso para dejar de agradecer lo que tienes y quien eres, en la gratitud están las bendiciones. Agradecer es llenarse de gracia; pero si debes tener una actitud de firmeza y la certeza que te indican que puedes ser mejor, que puedes limpiar y limpiarte, sacudirte y continuar hacia una vida más ligera y plena.
Creo que esto ya lo sabías, pero espero que este escrito te haga tomar acción. Lo más importante no es lo que sabes si no lo que aplicas.
En el año 2014 mi hija Julieta nació con parálisis cerebral, esto nos llevó a transformar por completo nuestro estilo de vida. Un año atrás, había iniciado un hobby nuevo, hacer Cupcakes y brownies. Por eso, cuando ella nace con esta condición, mi esposo renuncia a su trabajo como jugador de fútbol profesional para dedicarse junto a mi, a ser un padre presente; y por supuesto nuestra economía tembló demasiado, debido a esta decisión, la pastelería se convirtió en nuestra fuente principal de ingresos, por eso entregamos lo mejor de cada uno y la hicimos crecer durante 8 años.
Cuando nuestra hija falleció en el año 2018, quedamos destruidos emocionalmente; pero seguimos triunfando con los pasteles. Sin embargo, había una carga enorme en mi, un llamado en mi interior que ardía profundamente.
Dos años más tarde me sentía aún más cansada, abrumada, y creyendo que no tenía salida; pero tomo la decisión de cerrar la pastelería en contra de todo pronóstico y de muchas personas que no entendían porque después de esos años de arduo trabajo y de éxito, yo no me sentía feliz. Lo normal es que continúes porque el dinero y la estabilidad están por encima de la felicidad en nuestra sociedad.
Sentí un alivio enorme aunque con mucho miedo. Me fui del país, sin dinero, prácticamente sin identidad, solté el papel de empresaria súper exitosa, deje a mi familia por unos meses y me abrí a nuevas experiencias. Esos meses fueron un regalo para mi, para reencontrarme con mis sueños y mi propósito.
Decidí soltar, vivir experiencias nuevas, conocer lugares y personas diferentes. El 2022 fue un año de muchos viajes, anécdotas y vivencias maravillosas, fue un año de cumplir sueños y de vivir por mi y para mi. Fue el año de la ley del vacío.
Hoy vivo la vida de mis sueños, porque solté, me liberé y aprendí a vivir sin cargas.
Con amor,
Alexandra Gómez S.
Comentarios
Publicar un comentario